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24/11/2017

Solo restan horas para que inicie la 6ta Asamblea del Coordinador Nacional Agrario (CNA) en San Alberto, Cesar. El encuentro que reunirá a representantes campesinos de 22 departamentos del país pretende emitir un mensaje político sobre la coyuntura nacional: “Cada Asamblea tiene un objetivo político de acuerdo a las dinámicas y necesidades del territorio escogido. Además de las luchas históricas del campesinado, en San Alberto la incursión paramilitar intentó exterminar el movimiento social. Escogemos este municipio para decir que nuestra actividad, más que legal, es legítima, es una necesidad, y es una obligación que tenemos las comunidades”, así lo afirmó Ernesto Alexander Roa, vicepresidente del CNA.

Para Gabriel Henao –integrante de la Comisión de Interlocución Sur de Bolívar, Centro y Sur del Cesar– la decisión de realizar la Asamblea en San Alberto es un respaldo político y moral para la localidad cesarense: “Estos han sido unos territorios muy productivos con unos intereses muy grandes. Como en toda Colombia, nosotros no hemos tenido derecho a la tierra, y en este momento no tenemos derecho a ser campesinos. Son importantes este tipo de espacios porque las comunidades se fortalecen”.

Con esta Asamblea el Coordinador Nacional Agrario espera evaluar los planes de trabajo planteados en encuentros anteriores; fortalecer su plataforma política; identificar si los campesinos cuentan con servicios de salud e infraestructuras acordes a sus necesidades; construir una propuesta que confronte la explotación mineroenergética de los territorios, las cadenas productivas vigentes, la concentración de la tierra y la vocación de los suelos; y consensuar las líneas de acción orientadas a la reivindicación de los derechos campesinos.

En la plataforma política del CNA la mujer tiene un rol fundamental en la recuperación del campo, la exigencia de condiciones de vida digna, y la conquista de la soberanía popular. Joana Pinzón,  habitante de Arauca e integrante de la Asociación Campesina José Antonio Galán Zorro (Asonalca), acude a la Asamblea con diversas expectativas: “Esperamos salir más unidos, con las propuestas claras y fortalecidas hasta que podamos ganarle la pelea al Estado y se nos reconozca como sujetos políticos de derechos. Además de consolidar la figura de los territorios campesinos agroalimentarios”.

Al igual que muchos de los asistentes a la Asamblea, Albeiro Patiño denuncia las inequidades de un sistema basado en la acumulación inequitativa de la tierra y el capital.  El representante legal de Asocaprile (Asociación de Campesinos Agropecuarios y Recuperadores del Playón del Río Lebrija) asegura que: “Los campesinos estamos llevando el peso de todas las represiones del Gobierno que apoya más al adinerado que a nosotros. Al adinerado todo se le facilita, al campesino no. No estoy en contra de los millonarios pero que tampoco nos pisoteen”.

Del 24 al 29 de noviembre, el campesinado colombiano exigirá lo que le corresponde y lo que el Estado le ha negado durante más de 50 años: una reforma agraria integral que fortalezca la economía campesina, garantice la vida digna, respete la autodeterminación y la soberanía popular.

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CNA