CARACTERIZACIÓN DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL DE LA UIS EN EL MARCO DEL ESCÁNDALO GENERADO POR LOS NEXOS DEL RECTOR CON LOS PARAMILITARES DEL PAÍS
Publicado en La Piedra en el Zapato, no7
FELIX: Doctor, Doctor Camacho
RECTOR: Si, si con él.
FELIX: Con él personalmente?
RECTOR: Si señor
FELIX: Cómo está Doctor?
RECTOR: Con quién hablo?
FELIX: Con Félix, cómo le terminó de ir?
RECTOR: Pues bien, bien afortunadamente.
FELIX: Disculpe si de pronto lo hice esperar, se me presentó un inconveniente…estaba recibiendo una comunicación y por eso no lo había ubicado.
RECTOR: No hay ninguna dificultad, cuénteme.
FELIX: A ver señor Camacho seguimos el paso a seguir, ya se codificó el positivo, le quedamos altamente agradecidos, seguimos con lo que veníamos haciendo… ¿no? Necesito que me haga un favor, usted tiene conocimiento pleno, información de los nombres de las personas que en este momento están realizando el papel de digerir (sic), o producir o llevar a cabo a que los muchachos estén siguiendo estos pasos de izquierda?
RECTOR: Hm, pues digamos que...
FELIX: Usted sabe que hay untados
RECTOR: Hm cómo?
FELIX: Usted sabe y yo sé que hay algunos profesores que están jodiendo con la vaina. Hmmm, es decir, vea doctor yo le voy a ser sincero, esto aquí se va a realizar es un plan pistola. La gente que está realizando eso, nosotros vamos a proceder contra ellos. Yo necesito que usted me colabore con el listado de la gente que usted cree que no está de acuerdo con lo que en la universidad se está realizando, sino que por el contrario quieren surgir cosas de izquierda, cosas que no van a traer beneficio a la población civil.
RECTOR: Si lo que yo puedo informarle, es de personas que son como lideres estudiantiles y han estado como al frente del movimiento
FELIX: Eso es lo que quiero, por favor con nombres claros si los tiene o dígame cuando los tiene y cómo podemos recoger esa información, no solamente educadores, si hay estudiantes, necesito una lista porque se va a realizar un plan bala…[ [Conversación del rector de la UIS con Felix, presunto paramilitar. ]]
Esta es la entrevista de publicación anónima en la que el rector de la Universidad Industrial de Santander, Jaime Alberto Camacho Pico, habla con un paramilitar llamado Felix sobre la entrega de los nombres de estudiantes y profesores activistas que se oponen a las directrices académicas y económicas que se establecen para el desarrollo de la universidad en el contexto del actual gobierno. Esta entrevista sale a la luz pública en el mes de abril de 2008 y las personas de las que se habla allí, a quienes quieren callar con el plan pistola, son los estudiantes y profesores que en abril de 2007 organizaron las protestas contra el plan de desarrollo institucional [ [Plan de desarrollo institucional 2008-2018. ]] y participaron en las mesas de diálogo para presentar una propuesta diferente que beneficiara a los estudiantes y al pueblo en su conjunto y no solo a los dueños del capital, cuyo objetivo es mercantilizar la educación y ponerla al servicio de los intereses financieros de la empresa. Transcurrió un año para que la gente conociera los planes de asesinato de los líderes de izquierda de la universidad por parte del estado, situación que no fue acogida con gran sorpresa por parte de los estudiantes y profesores, ni por la comunidad en general pues esa ha sido siempre la estrategia del Estado para silenciar toda opinión diferente, el gobierno desde siempre ha masacrado, desaparecido y borrado del mapa a aquellos que han trabajado por defender las causas sociales. Ni la sorpresa, ni el asombro caben ya en la mente y en corazón de una sociedad acallada históricamente a machete y balazo, el sentimiento es de rabia y decepción para algunos y para otros la consecuencia lógica de una cadena de hechos originados en una institución de un país gobernado por paramilitares que actúan protegidos por la eficacia de la impunidad. Cuando se conocieron los vínculos del Rector con los paramilitares, los estudiantes respondieron con asambleas1 . Ante ésta arbitraria decisión, los estudiantes una vez más se movilizaron tomándose una iglesia de la ciudad, la Sagrada Familia, para exigir que la Universidad y el semestre fueran reabiertos. Con este hecho, las directivas lograron desviar la atención del centro del problema: que la universidad estaba dirigida por administrativos con nexos paramilitares e hicieron que el problema y su solución giraran en torno al cierre y a la apertura de la Universidad. La pregunta que surge es por qué no se logró el objetivo de destituir al rector por sus nexos con los paramilitares, y dar un debate abierto en torno al poder del paramilitarismo como mecanismo estatal de control social en la universidad y en el país? Para conseguir objetivos políticos, es necesario conseguir la unidad en torno a objetivos y a formas de lucha todo dentro de un claro análisis de la situación política dada, y el actual movimiento estudiantil no tiene ni lo uno ni lo otro. El movimiento estudiantil actual, si es que al menos puede llamarse así, está dividido entre personas con distintos análisis de la situación política del país que actúan en torno a la coyuntura y tratan de darle solución desde sus diversos intereses. Se trata por un lado, de una izquierda desorganizada y sin un ejemplo que logre generar consensus , que no tiene influencia en la mayoría de los estudiantes, y por el otro lado, de una derecha que se atreve ahora a actuar ya que siente el respaldo de las directivas y del gobierno. Dentro del primer grupo circulan el pensamiento crítico hacia los proyectos del Estado que busca mercantilizar la educación y ajustar la universidad al modelo económico capitalista, la creación de grupos paramilitares para sembrar terror y mantener el orden social establecido para llevar a cabo los mega-proyectos. También hacen parte de este grupo los que piensan que el problema de la universidad está completamente ligado a la economía y a la política del gobierno y que proponen una educación que tenga como objetivo la auto-determinación del país, que debata sobre si la educación debe estar diseñada para servir a las empresas o a la gente, y que tenga como objetivo el despertar político para que la gente pueda ser la gestora de los procesos de cambio. En el segundo grupo están aquellos que quieren promover un movimiento estudiantil desde arriba, vocero y apoyo de las propuestas de vincular la universidad a la empresa, de convertila en un centro masivo de educación de precaria calidad, todo por el lucro inmediato. Para estos fines desconocen por completo las nefastas consecuencias que el sistema económico causa en la gente y hasta apoyan los mecanismos de control para-estatal (paramilitares y Estado) porque garantizan el desarrollo sin obstáculos de los proyectos económicos. En este orden, los primeros actúan proponiendo marchas, asambleas, mítines en los que algunas veces se reivindica la violencia para enfrentar las agresiones del Estado. Propuestas que no tienen una gran influencia en las bases de estudiantes. Ahora podemos preguntarnos el por qué de la falta de influencia en las bases en un contexto social liderado por el capital y sus asesinos a sueldo que lo protegen. Y es que los de arriba han sabido hacer el trabajo, han utilizado la lucha armada de la guerrilla, a quien etiquetaron de terrorista, para etiquetar a su vez a todo aquel quien proponga una idea de cambio, cualquier persona que manifieste su oposición es señalada como terrorista, digna de ser aniquilada por los ejércitos paramilitares de control social. En esta lógica han señalado, perseguido, asesinado y desaparecido estudiantes rebeldes, han utilizado los medios de comunicación para desacreditar toda forma de lucha, para promover el individualismo y hacer fantasear a la gente con una vida digna dentro del sistema económico actual pese a que la realidad muestra que éste sólo genera miseria. A fuerza de repetir escándalos paramilitares y casos vergonzosos de corrupción han hecho que estas formas de gobierno sean aceptadas como parte normal de la dinámica de la sociedad y dentro de toda esta afanosa manipulación, los estudiantes no tienen espacio para el debate que lleve a tener una clara comprensión política de la situación nacional. No son los tiempos de AUDESA, gran movimiento estudiantil de los años 70, construido desde abajo, con profundo y claro análisis de la situación política, con gran influencia en los estudiantes y en la gente de afuera. En esa época se tenía como referente de lucha a las guerrillas nacionales, alzadas en armas y que proponían la toma del poder desde y para el pueblo y al mismo tiempo la activa participación de diversos sectores sociales permitía pensar en un papel protagónico de la gente en las transformaciones sociales. En este momento el movimiento no tiene los mismos referentes de lucha puesto que ahora, según el gobierno, las guerrillas son terroristas y el móvil del gobierno es exterminarlas y con ello a todo lo que oponga resistencia. Además, las guerrillas no tienen un plan de lucha que logre unir al pueblo y tampoco existe una propuesta de izquierda organizada en el país. Estamos en un momento de crisis paramilitar dentro de un ambiente de total impunidad2 , que canaliza sus aspiraciones a lo inmediato y que empeora gradualmente vidas humanas. Finalmente, dentro de este contexto existen estudiantes que plantean que es necesario dejar de ser engañados y luchar desde abajo contra el poder instaurado y para esto trabajan por mostrar las causas fundamentales de los problemas. Proponen forjar un movimiento de estudiantes que se una a la gente y cuyo objetivo sea una transformación radicalde la sociedad. Existen las ideas, pero no existe una real y gran influencia en las bases. Un desafio enorme que sin embargo no desalienta a algunos estudiantes, mujeres, obreros, campesinos y desemplead°s, que aún siendo minoría, amenazados y fuertemente reprimidos, se empeñan tercamente en desafiar la impunidad insitucionalizada y en construir una sociedad mas justa.
Esta es la entrevista de publicación anónima en la que el rector de la Universidad Industrial de Santander, Jaime Alberto Camacho Pico, habla con un paramilitar llamado Felix sobre la entrega de los nombres de estudiantes y profesores activistas que se oponen a las directrices académicas y económicas que se establecen para el desarrollo de la universidad en el contexto del actual gobierno. Esta entrevista sale a la luz pública en el mes de abril de 2008 y las personas de las que se habla allí, a quienes quieren callar con el plan pistola, son los estudiantes y profesores que en abril de 2007 organizaron las protestas contra el plan de desarrollo institucional [ [Plan de desarrollo institucional 2008-2018. ]] y participaron en las mesas de diálogo para presentar una propuesta diferente que beneficiara a los estudiantes y al pueblo en su conjunto y no solo a los dueños del capital, cuyo objetivo es mercantilizar la educación y ponerla al servicio de los intereses financieros de la empresa. Transcurrió un año para que la gente conociera los planes de asesinato de los líderes de izquierda de la universidad por parte del estado, situación que no fue acogida con gran sorpresa por parte de los estudiantes y profesores, ni por la comunidad en general pues esa ha sido siempre la estrategia del Estado para silenciar toda opinión diferente, el gobierno desde siempre ha masacrado, desaparecido y borrado del mapa a aquellos que han trabajado por defender las causas sociales. Ni la sorpresa, ni el asombro caben ya en la mente y en corazón de una sociedad acallada históricamente a machete y balazo, el sentimiento es de rabia y decepción para algunos y para otros la consecuencia lógica de una cadena de hechos originados en una institución de un país gobernado por paramilitares que actúan protegidos por la eficacia de la impunidad. Cuando se conocieron los vínculos del Rector con los paramilitares, los estudiantes respondieron con asambleas1 . Ante ésta arbitraria decisión, los estudiantes una vez más se movilizaron tomándose una iglesia de la ciudad, la Sagrada Familia, para exigir que la Universidad y el semestre fueran reabiertos. Con este hecho, las directivas lograron desviar la atención del centro del problema: que la universidad estaba dirigida por administrativos con nexos paramilitares e hicieron que el problema y su solución giraran en torno al cierre y a la apertura de la Universidad. La pregunta que surge es por qué no se logró el objetivo de destituir al rector por sus nexos con los paramilitares, y dar un debate abierto en torno al poder del paramilitarismo como mecanismo estatal de control social en la universidad y en el país? Para conseguir objetivos políticos, es necesario conseguir la unidad en torno a objetivos y a formas de lucha todo dentro de un claro análisis de la situación política dada, y el actual movimiento estudiantil no tiene ni lo uno ni lo otro. El movimiento estudiantil actual, si es que al menos puede llamarse así, está dividido entre personas con distintos análisis de la situación política del país que actúan en torno a la coyuntura y tratan de darle solución desde sus diversos intereses. Se trata por un lado, de una izquierda desorganizada y sin un ejemplo que logre generar consensus , que no tiene influencia en la mayoría de los estudiantes, y por el otro lado, de una derecha que se atreve ahora a actuar ya que siente el respaldo de las directivas y del gobierno. Dentro del primer grupo circulan el pensamiento crítico hacia los proyectos del Estado que busca mercantilizar la educación y ajustar la universidad al modelo económico capitalista, la creación de grupos paramilitares para sembrar terror y mantener el orden social establecido para llevar a cabo los mega-proyectos. También hacen parte de este grupo los que piensan que el problema de la universidad está completamente ligado a la economía y a la política del gobierno y que proponen una educación que tenga como objetivo la auto-determinación del país, que debata sobre si la educación debe estar diseñada para servir a las empresas o a la gente, y que tenga como objetivo el despertar político para que la gente pueda ser la gestora de los procesos de cambio. En el segundo grupo están aquellos que quieren promover un movimiento estudiantil desde arriba, vocero y apoyo de las propuestas de vincular la universidad a la empresa, de convertila en un centro masivo de educación de precaria calidad, todo por el lucro inmediato. Para estos fines desconocen por completo las nefastas consecuencias que el sistema económico causa en la gente y hasta apoyan los mecanismos de control para-estatal (paramilitares y Estado) porque garantizan el desarrollo sin obstáculos de los proyectos económicos. En este orden, los primeros actúan proponiendo marchas, asambleas, mítines en los que algunas veces se reivindica la violencia para enfrentar las agresiones del Estado. Propuestas que no tienen una gran influencia en las bases de estudiantes. Ahora podemos preguntarnos el por qué de la falta de influencia en las bases en un contexto social liderado por el capital y sus asesinos a sueldo que lo protegen. Y es que los de arriba han sabido hacer el trabajo, han utilizado la lucha armada de la guerrilla, a quien etiquetaron de terrorista, para etiquetar a su vez a todo aquel quien proponga una idea de cambio, cualquier persona que manifieste su oposición es señalada como terrorista, digna de ser aniquilada por los ejércitos paramilitares de control social. En esta lógica han señalado, perseguido, asesinado y desaparecido estudiantes rebeldes, han utilizado los medios de comunicación para desacreditar toda forma de lucha, para promover el individualismo y hacer fantasear a la gente con una vida digna dentro del sistema económico actual pese a que la realidad muestra que éste sólo genera miseria. A fuerza de repetir escándalos paramilitares y casos vergonzosos de corrupción han hecho que estas formas de gobierno sean aceptadas como parte normal de la dinámica de la sociedad y dentro de toda esta afanosa manipulación, los estudiantes no tienen espacio para el debate que lleve a tener una clara comprensión política de la situación nacional. No son los tiempos de AUDESA, gran movimiento estudiantil de los años 70, construido desde abajo, con profundo y claro análisis de la situación política, con gran influencia en los estudiantes y en la gente de afuera. En esa época se tenía como referente de lucha a las guerrillas nacionales, alzadas en armas y que proponían la toma del poder desde y para el pueblo y al mismo tiempo la activa participación de diversos sectores sociales permitía pensar en un papel protagónico de la gente en las transformaciones sociales. En este momento el movimiento no tiene los mismos referentes de lucha puesto que ahora, según el gobierno, las guerrillas son terroristas y el móvil del gobierno es exterminarlas y con ello a todo lo que oponga resistencia. Además, las guerrillas no tienen un plan de lucha que logre unir al pueblo y tampoco existe una propuesta de izquierda organizada en el país. Estamos en un momento de crisis paramilitar dentro de un ambiente de total impunidad2 , que canaliza sus aspiraciones a lo inmediato y que empeora gradualmente vidas humanas. Finalmente, dentro de este contexto existen estudiantes que plantean que es necesario dejar de ser engañados y luchar desde abajo contra el poder instaurado y para esto trabajan por mostrar las causas fundamentales de los problemas. Proponen forjar un movimiento de estudiantes que se una a la gente y cuyo objetivo sea una transformación radicalde la sociedad. Existen las ideas, pero no existe una real y gran influencia en las bases. Un desafio enorme que sin embargo no desalienta a algunos estudiantes, mujeres, obreros, campesinos y desemplead°s, que aún siendo minoría, amenazados y fuertemente reprimidos, se empeñan tercamente en desafiar la impunidad insitucionalizada y en construir una sociedad mas justa.
Notas
- Reunión de todos los estudiantes en la plazoleta central, mientras los edificios de Universidad se encuentran cerrados para garantizar la asistencia de todo el estudiantado.]] , cierres y marchas. La exigencia era la renuncia del rector con la consecuente investigación de la relación de éste con el paramilitarismo y la reforma de los estatutos para que los estudiantes pudiesen votar de manera directa en las elecciones de éste, puesto que hasta ahora sólo pueden participar en una consulta de opinión. Un sector de profesores, por su parte, también se reunió en asambleas a las que llamaron al rector a rendir cuentas y en donde le cuestionaban sus presuntos nexos con el paramilitarismo. El rector respondió que él no tenía ningun vínculo con los paramilitares y que la grabación correspondía a un plan en el que él debía participar para capturar al paramilitar. La respuesta de las directivas ante las exigencias de los estudiantes fue el cierre de la universidad, la cancelación del semestre académico, y la reelección del rector[[Es de resaltar que la reelección es un tema actual en el país, puesto que el presidente quien llegó al poder en el 2002 cambió la Constitución para poder ser elegido por segunda vez y ahora esta en marcha el referendo que apunta a una tercera reelección.
- En Colombia la estructura del poder paramilitar ha manipulado las instituciones encargadas de la administración de la justicia lo que hace que todos los casos de violaciones a los derechos humanos y los nexos de representantes del poder con paramilitares queden sin un debido proceso de investigación y castigo. Véase como ejemplo la absolución de cargos de militares involucrados en asesinatos de civiles para presentarlos como guerrilleros muertos en combate, llamados falsos positivos.]] , en el que el gobierno, apoyado por Estados Unidos, ha creado estos ejércitos de asesinos para controlar cualquier expresión de organización y lucha que puedan originar cambios cualitativos y cuantitativos en beneficio de la gente. El resultado en un sistema en continua crisis que distrae a la gente de las causas fundamentales [[Ejemplo de esto es el vuelco que le dieron las directivas a los objetivos del movimiento de estudiantes de hacer renunciar al rector por sus nexos con paramilitares. Las directivas cerraron la universidad y el desarticulado movimiento estudiantil centro entonces su lucha en la apertura de la universidad y dejó de lado su objetivo principal, la renuncia del rector y el amplio debate y lucha contra el paramilitarismo. Una vez más éste escándalo no fue resuelto, no hubo ninguna investigación por parte de las autoridades competentes, fue suspendido en la impunidad.