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30/06/2011

INCURSIONES PARAMILITARES EN JIGUAMIANDO Y AMENAZAS A ACOMPAÑANTE INTERNACIONAL

Nuevamente nuestra Constancia Histórica y Censura Ética frente a las nuevas agresiones y amenazas paramilitares a integrantes del consejo comunitario que habitan en la Zona Humanitaria de Nueva Esperanza; los que habitan en la Zona Humanitaria de El Tesoro y operadores humanitarios internacionales. Desde hace 12 días se ha informado al gobierno colombiano de la presencia de cerca de 200 paramilitares en el territorio colectivo de Jiguamiandó, entre los caseríos de Bella Flor Remacho y Santafé de Churima, desde el que se vienen cometiendo atropellos a la población civil. Los paramilitares están ofreciendo dinero promoviendo la participación en sus filas o a quiénes siembren coca, ofrecen bebidas alcohólicas y promueven fiestas. Han afirmado que van a combatir a la guerrilla, a quiénes sean sus simpatizantes, sostienen que están promoviendo el progreso y que vendrán agronegocios de palma, de banano, de ganadería extensiva. A pesar de estas informaciones, así como la concentración de paramilitares en el área del corregimiento de Barranquillita, días antes de fiestas en esta localidad, las operaciones anunciadas de incursión están acompañadas de nuevos signos de la posibilidad de eventuales daños irreparables. Horas antes y después de la Audiencia ante la Corte Interamericana se produjeron nuevas agresiones paramilitares, los anuncios de incursión que reflejan la gravedad de la situación, nuestra Constancia Histórica ante los siguientes fundamentos fácticos. *Domingo 26 de junio a las 11:06 a.m. nuestra Comisión de Justicia y Paz en Bogotá fue informada de la presencia de cuatro paramilitares vestidos de civil con material de guerra ingresaron a la Zona Humanitaria de Nueva Esperanza. El ingreso de los paramilitares fue informado al gobierno nacional. Ante la ausencia de reacción de la fuerza pública y cuando lograron integrarse las y los integrantes del consejo comunitario que se encontraban trabajando, apoyados con acompañantes nacionales e internacionales se dirigieron a los cuatro paramilitares, exigiendo el retiro del espacio humanitario. En ese momento se observó que uno de los paramilitares portaba material explosivo, una granada, una bolsa con plata. Algunos presumen que también tenían un arma de fuego corta. Al verse obligados a salir del lugar, le advirtieron a RICHARD ANTONIO GUARAHONA un integrante de la Zona Humanitaria Nueva Esperanza que debía controlar a la mujer, refriéndose a MANUELA SANTANA. La amenaza velada responde a la decisión de la mujer de este integrante de sumarse a la exigencia de retirarse del lugar a los cuatro paramilitares. A la internacional ELISA NORIO, defensora de derechos humanos y ambientales, en medio de varios pobladores, le expresaron: “vamos a casar una monita”. *Lunes 27 de junio a las 8:46 a.m., el integrante del Consejo Menor de Buenavista, habitante de la Zona Humanitaria NEVIS YANES recibió un mensaje de texto a su teléfono celular número 3113039473 enviado del teléfono 3205122162 con la siguiente amenaza: " vea malparido, hijo de puta ya nosotros sabemos de las denuncias que estás haciendo pero no te preocupes que muy pronto te callaremos y gran malparido no te mates la mente pensando quienes somos porque muy pronto te tendremos y ahí sabrás que grupo somos, no te mandamos a decir cuántas ganas tenemos de matarte porque no tenemos tiempo para una basura como tu malparido ". Esta amenaza fue reportada a nuestra Comisión de Justicia y Paz en Bogotá a las 8:45 p.m. Este mismo día, a las 11:40 a.m. nuestra Comisión de Justicia y Paz en Bogotá fue informada por habitantes del consejo comunitario de Jiguamiandó que fueron abordados por los paramilitares en ese territorio colectivo. Los armados anunciaron que irían en los próximos días a la Zona Humanitaria de Pueblo Nuevo. De acuerdo con la versión, los paramilitares, vestidos de civil, con arma larga y corta, se encontraban en estado de embriaguez. Repitieron los anuncios de los días anteriores, de la importancia de la siembra de coca. A las 5:45 p.m. aproximadamente en el territorio colectivo de Curbaradó, se escucharon detonaciones y ráfagas cerca de la Zona Humanitaria de Caracolí y en cercanías del poblado de San José Gengadó medio. Nuestra Censura Ética ante la persistencia de operaciones paramilitares dentro del territorio colectivo de Curbaradó y Jiguamiandó sin que exista ningún tipo de reacción, mientras los abusos están en aumento. Nuestra Censura Ética ante la implementación de siembras de coca en los límites de los territorios colectivos sin que exista reacción alguna de las estructuras institucionales para enfrentar estas operaciones ilegales. Nuestra Censura Ética ante la inacción, la ausencia de medidas efectivas de prevención y de reacción inmediata. Desde abril pasado el número de personas con amenazas de muerte directa, enlistados en los anuncios de ataques y que son blanco militar de los paramilitares son más de 30 integrantes de los consejos comunitarios, que habitan en las Zonas Humanitarias y Zonas de Biodiversidad de Curbaradò y Jiguamiandò. Es evidente la ausencia de garantías para el ejercicio legítimo de la libre expresión, la libre asociación, la libertad para el uso del suelo. Dentro de las amenazadas, que ha llevado a la renuncia a ser parte del grupo referencial de adultos mayores en el proceso del censo se encuentran LIGIA MARÍA CHAVERRA, Zona Humanitaria Camelias El Tesoro; y MARÍA CORREA, del consejo comunitario Llano Rico. Los amenazados a la fecha además de las dos integrantes de los consejos comunitarios de Curbaradò, se encuentran MANUEL DENIS BLANDÓN, MELKIS ROMAÑA, ROMUALDO SALCEDO de la Zona Humanitaria de Pueblo Nuevo; ENRIQUE PETRO, PEDRO CORTÉS, ELIÉCER RAMOS de la Zona Humanitaria de Andalucía Caño Claro; RAÚL PALACIOS SALAS, SIXTA TULIA PÉREZ, BLANCA REBOLLEDO, LIRÍA ROSA GARCÍA, EDWIN MARTÍNEZ de la Zona Humanitaria de Caracolí; LEYDIS TUIRÁN, NOEMI MESA, NANCY SIERRA, SANTANDER NISPERUSA, ALFONSO SAYA, MIGUEL MERCADO, DALIDA SÁNCHEZ, SILVIO MERCADO, ANDRÉS LANCE, PAOLA LANCE de la Zona Humanitaria de Caño Manso; EUSTAQUIO POLO, URIEL TUBERQUIA,ADRIANA TUBERQUIA, MARIO CASTAÑO, FRANKLIN YAÑEZ, JOSÉ FRANCISCO ROSARIO de la Zona Humanitaria de Caracolí El Tesoro; GUILLERMO DÍAZ, ENRIQUE CABEZAS de la Zona Humanitaria “Argenito Díaz” de Llano Rico; BENJAMÍN SIERRA, ERASMO SIERRA de la Zona Humanitaria Nueva Esperanza; NEVYS YANES, LUIS DURANGO,ATANAEL MARTÍNEZ, DAVID RECUERO, WILLIAM PLAZAS, JAMES TOVAR Ante este listado de 12 mujeres lideresas amenazadas, y más de 20 hombres, qué medidas se van a adoptar con carácter expedito de tipo material y de carácter preventivo estructural? Ante la ausencia de investigación eficaz tendientes a evitar la repetición de amenazas, de señalamientos, de persecución judicial, de operaciones ilegales, que correctivos expeditos se van a producir? Con profunda preocupación, Comisión Intereclesial de Justicia y Paz ************* MODELO DE CARTA ********************** ENVIAR A : À : comunicacionesvp@presidencia.gov.co, agenda@agenda.gov.co, german.vargas@mij.gov.co, cap@procuraduria.gov.co ; quejas@procuraduria.gov.co , mdn@cable.net.co CC : donuginebra@cancilleria.gov.co ****************************** Sr. Juan Manual Santos, Presidente de la República de Colombia Sr. Angelino Garzón , Vicepresidente de la República de Colombia Sr. Germán Vargas Lleras, Ministerio del Interior Sr. Alejandro Ordoñez, Procurador General de la Nación Sr. Volmar Pérez, Defensor Nacional del Pueblo Sr. Rodrigo Rivera, Ministro de la Defensa Con copia a : Misión Permanente de Colombia ante Naciones Unidas en Ginebra Objeto : Bajo Atrato : Incursiones paramilitares y amenazas de muerte Desde hace unos diez días se ha informado al gobierno colombiano de la presencia de cerca de 200 paramilitares en el territorio colectivo de Jiguamiandó, entre los caseríos de Bella Flor Remacho y Santafé de Churima, desde el que se vienen cometiendo atropellos a la población civil. Desde abril pasado el número de personas con amenazas de muerte directa, enlistados en los anuncios de ataques y que son blanco militar de los paramilitares son más de 30 integrantes de los consejos comunitarios, que habitan en las Zonas Humanitarias y Zonas de Biodiversidad de Curbaradò y Jiguamiandò. Los paramilitares están ofreciendo dinero promoviendo la participación en sus filas o a quiénes siembren coca, ofrecen bebidas alcohólicas y promueven fiestas. Han afirmado que van a combatir a la guerrilla, a quiénes sean sus simpatizantes, sostienen que están promoviendo el progreso y que vendrán agronegocios de palma, de banano, de ganadería extensiva. Horas antes y después de la Audiencia ante la Corte Interamericana se produjeron nuevas agresiones paramilitares, los anuncios de incursión que reflejan la gravedad de la situación. El domingo 26 de junio, la Comisión de Justicia y Paz en Bogotá fue informada de la presencia de cuatro paramilitares vestidos de civil con material de guerra ingresaron a la Zona Humanitaria de Nueva Esperanza. El ingreso de los paramilitares fue informado al gobierno nacional. Ante la ausencia de reacción de la fuerza pública y cuando lograron integrarse las y los integrantes del consejo comunitario que se encontraban trabajando, apoyados con acompañantes nacionales e internacionales se dirigieron a los cuatro paramilitares, exigiendo el retiro del espacio humanitario. A la internacional ELISA NORIO, defensora de derechos humanos y ambientales, en medio de varios pobladores, los paramilitares expresaron: “vamos a casar una monita”. El lunes 27 de junio, la Comisión de Justicia y Paz en Bogotá fue informada por habitantes del consejo comunitario de Jiguamiandó que fueron abordados por los paramilitares en ese territorio colectivo. Los armados anunciaron que irían en los próximos días a la Zona Humanitaria de Pueblo Nuevo. Estamos muy preocupados ante la persistencia de operaciones paramilitares dentro del territorio colectivo de Curbaradó y Jiguamiandó sin que exista ningún tipo de reacción, mientras los abusos están en aumento. Tambien nos preocupa la implementación de siembras de coca en los límites de los territorios colectivos sin que exista reacción alguna de las estructuras institucionales para enfrentar estas operaciones ilegales. Solicitamos de parte de las autoridades competentes que se tomen medidas efectivas de prevención y de reacción inmediata ante la actuación paramilitar en la región para proteger la vida de los habitantes así como el labor de los acompañantes nacionales e internacionales, defensores de derechos humanos. Con profunda preocupación, FIRMA, ORGANIZACION PAIS