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05/06/2013



Por medio de irregularidades jurídicas, terror militar, y en concomitancia con el personero de Chimichagua quien se desplaza con militares en una camioneta sin placas que la identifiquen, se pretende desplazar de nuevo a 17 familias de la comunidad de Pitalito en el Cesar. Estas familias retornaron a su vereda Pitalito, después de dos años y medio de ser sometidos a desplazamiento forzado, a la persecución y a la estigmatización. El principal actor de este crimen con fines de despojo es por el palmicultor JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO.

 
En irregular actuación inicia jurídicamente el lanzamiento de la comunidad retornada a Pitalito Cesar


HACEMOS UN LLAMADO PARA EVITARLO


El viernes 24 de mayo de 2013, cerca de las 10:50 de la mañana hasta la 1:40 de la tarde, hicieron presencia en el asentamiento humanitario donde actualmente se encuentran 17 familias retornadas de la comunidad Campesina de Pitalito, el personero de Chimichagua CARLOS ALBERTO SERRANO CABALLERO, el inspector de este municipio HECTOR POLO MARTINEZ, y el Teniente Coronel RÓMULO FONSECA, comandante del Batallón Especial y Vial No. 3, custodiados por efectivos del Ejército Nacional, con el propósito de efectuar inspección ocular dentro de la querella policial de lanzamiento interpuesta el día anterior por el palmicultor JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO.


Los funcionarios, que se movilizaban en una camioneta doble cabina sin placas; al llegar al asentamiento humanitario pretendieron empadronar a las familias y acompañantes. Uno de los militares tomó fotografías a los miembros de la comunidad, al abogado del Equipo Jurídico Pueblo y voluntario de la FCSPP ROMMEL JOHNATAN DURAN CASTELLANOS, y a los acompañantes internacionales.


La presencia de los funcionarios públicos aquí citados, y los militares, se justificó bajo el argumento de adelantar una inspección ocular en el marco de un proceso policivo de lanzamiento por ocupación de hecho, iniciado por JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO el día anterior (22 de mayo) ante el Alcalde de Chimichagua contra “indeterminados” con el que pretende en forma concreta que se ordene el desalojo contra la comunidad.

 

La inspección ocular practicada en el asentamiento humanitario genera preocupación por las múltiples irregularidades percibidas por todos los presentes:


-           Inicialmente produce curiosidad que la diligencia fuera ordenada sólo un día después de haberse interpuesto personalmente, por FERNANDEZ DE CASTRO la querella policiva, cuando es conocido por todos la lentitud de esta clase de actuaciones administrativas.


-          La presencia del Comandante del Batallón Especial y Vial No. 3 Teniente Coronel RÓMULO FONSECA, quien además coordinó prácticamente la diligencia tomando vocería procediendo a reunir a la comunidad en la caseta comunitaria, incluso grabando la reunión desde su teléfono celular.

-         El papel desarrollado por el Personero, funcionario del Estado, supuestamente representante de la sociedad encargado de la protección de los derechos humanos, quien generó inquietud entre las familias por su clara postura a favor FERNANDEZ DE CASTRO y los señalamientos contra la comunidad de estar afectando el derecho a la propiedad privada del querellante.


En el transcurso de la diligencia, el Personero de Chimichagua CARLOS ALBERTO SERRANO CABALLERO y el Teniente Coronel FONSECA, requirieron a los acompañantes internacionales (del Observatorio Internacional de Paz – IPO) para que se identificaran plenamente, e incluso realizaron el registro fotográfico de los documentos de identidad de uno de ellos.


El Personero guardó total silencio respecto a la presencia en la diligencia de civiles con radios de comunicaciones supuestamente trabajadores del palmero JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO DEL CASTILLO.

 

La Comunidad Campesina de Pitalito retornó a su territorio el 21 de mayo de 2013; sus predios habían sido apoderados de forma fraudulenta en el 2010 por el palmero JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO; desde el día del retorno, las familias han sido objeto de intimidación por parte del Fuerza Pública y civiles con radios al servicio del despojador.

 

En el día de hoy, (mayo 29) se está radicando ante el Alcalde de Chimichagua AMAURI VILLARREAL TORDECILLA, escrito de oposición por parte de cada una de la familias de la Comunidad Campesina de Pitalito, en la que mediante una argumentación jurídica sólida se solicita denegar las pretensiones del palmero FERNANDEZ DE CASTRO, evitando cualquier desalojo de las familias. Una vez radicada la oposición, el Alcalde municipal debe tomar una decisión de fondo.

 

Esperamos que en esta ocasión no se repita lo ocurrido en el 2010, en la que el mandatario local de Chimichagua, junto con el personero municipal de la época, apoyados por la fuerza pública y Ejercito Nacional, desplazaron forzadamente a los campesinos que por varios años han  ejercido la posesión sobre estos predios.

 

Hacemos un llamado a todas las organizaciones sociales, de derechos humanos, de víctimas, organizaciones sindicales, populares, dirigir sus escritos al Alcalde Municipal de Chimichagua, apoyando las pretensiones de la comunidad y exigiendo garantías para el retorno.
 

Author
Congreso de los Pueblos