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04/07/2013

El 7 de junio de 2013, siendo las 10:05 a.m. mientras que el abogado LEONARDO JAIMES MARIN, acompañado de PBI y un miembro de la comunidad transitaban en  el vehículo asignado a su esquema de protección; entre la vereda Pitalito al casco urbano de Curumaní, a la altura del cruce donde termina la vereda, lugar donde se encuentra ubicado un portón, se percataron de la presencia de un hombre subido en un árbol tomando fotografías tanto del vehículo como de sus integrantes.

Ante esta situación, el abogado del Equipo Jurídico Pueblos y la Fundación comité de solidaridad con los presos políticos; descendió de la camioneta y solicitó al sujeto explicación de las razones por las que se encontraba tomando fotografías, a lo que respondió que él trabajaba para FERNANDEZ DE CASTRO, y en actitud nerviosa se negó a informar cuáles fueron las órdenes precisas recibidas de su jefe, atinando simplemente a decir “hablen con el señor JUAN MANUEL”, y a señalar que estaba allí controlando el portón por cuanto lo han dejado abierto y se han perdido 35 reses, tratando de insinuar que la comunidad es la responsable. Es de aclarar unos minutos antes había pasado por ese punto la camioneta conducida por JOSE ALBEIRO MARTINEZ, integrante de la comunidad, lo que permitiría inferir que también fue fotografiada.

Una vez nos alejamos, fuimos testigos que el hombre inmediatamente se comunicó mediante un radio de comunicaciones.

Nos resulta realmente grave el incremento de las acciones de persecución e inteligencia que viene ordenando JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO DEL CASTILLO contra los miembros de la comunidad y sus acompañantes nacionales e internacionales. Vistos en contexto, estos hechos evidencian que la actuación del terrateniente se asimila cada vez más a la utilizada desde las estructuras criminales que han protegido poderosos intereses económicos desde varios años atrás.

Con razón, el representante IVAN CEPEDA CASTRO recientemente señaló que “estamos volviendo al tiempo de las ‘Convivir’. Estos Departamentos son organizaciones de carácter privado que asumen funciones y se toman atribuciones de Fuerza Pública…”, y que están dedicados hoy a reprimir y hostigar a campesinos y organizaciones que propugnan por la restitución de tierras.

Recuérdese que en el año 2010, la comunidad desplazada de Pitalito denunció ante las autoridades locales – sin recibir protección, ni respuesta alguna – que JUAN MANUEL FERNANDEZ DE CASTRO DEL CASTILLO, ingresó a las tierras a un grupo armado y dotados de medios de comunicación, conformado por hombres guajiros, cuyo accionar calificaron como idéntico al de estructuras paramilitares, toda vez que se dedicaron a intimidar a los campesinos, asesinando sus animales domésticos, haciendo disparos al aire o dirigidos hacia estas víctimas, realizando detenciones arbitrarias para presionar a las personas, etc, lo que produjo un permanente estado de inseguridad, terror y zozobra. En los últimos días, nos hemos percatado de la operatividad de hombres civiles, dotados de radios de comunicación, que se han dedicado a tomar fotografías de la comunidad, su asentamiento, los vehículos en que se moviliza ésta y sus acompañantes, etc.

Nuevamente dejamos constancia del riesgo en que se encuentra la Comunidad retornada a Pitalito y sus acompañantes nacionales e internacionales, y desde ya, responsabilizamos al terrateniente FERNANDEZ DE CASTRO DEL CASTILLO, por cualquier acto de represión que se pueda presentar contra ellos.

La cada vez más grave situación de seguridad de este proceso comunitario, hacemos un nuevo llamado a la comunidad nacional a seguir vigilante de lo que ocurra, exigiendo a las autoridades del Estado las garantías necesarias para los campesinos que retornan a sus tierras voluntariamente y a las organizaciones internacionales, solicitamos persistir y fortalecer el acompañamiento a las familias de la vereda Pitalito.

Junio 07 de 2013
Comité de Solidaridad con los presos políticos
Equipo Jurídico Pueblos
Movimiento de Trabajadores y Campesinos del Cesar - MTCC
 

Author
Comité de Solidaridad con los presos políticos