Curvarado
A las actuaciones extrañas contra la lideresa Ligia Chaverra se suma el ingreso de hombres desconocidos en la región a la Zona Humanitaria Andalucía en donde habita Enrique Petro.
Hacia las 8:30 p.m. siete hombres en cuatro motocicletas ingresaron a la propiedad del líder de restitución Enrique Petro, integrante del Consejo Comunitario de Andalucía, territorio colectivo de Curvaradó.
Cuando Petro abordó a los militares por la presencia de los hombres en su propiedad, los militares argumentaron que se trataba de habitantes de Llano Rico, territorio colectivo de Curvaradó que venían a pescar. De acuerdo con los testigos, ninguna de las personas son conocidas en la región y no son integrantes del consejo comunitario.
En la reclamación por la actuación de los efectivos regulares, Petro les pregunto si estos tenían la identificación de los extraños visitantes, estos manifestaron que no lo habían hecho.
Desde esa noche no hay presencia perimetral de las unidades militares, a pesar del conocimiento de las amenazas de muerte que pesan contra la vida e integridad de Enrique Petro.
Los niveles de riesgo se incrementaron a raíz del testimonio rendido en diciembre pasado por este líder en el juicio que se sigue contra empresarios palmeros. En su paso por Belén de Bajirá paramilitares y trabajadores de las empresas manifestaron que conocían lo que estaba haciendo en Medellín, manifestación en tono de advertencia
En desarrollo del juicio Petro se reiteró en su testimonio que da cuenta del despojo territorial, las operaciones empresariales y paramilitares y de efectivos de la brigada 17.
Petro identificó a uno de los acusados como relacionado con los paramilitares, indicando circunstancias de modo tiempo y lugar, se trata de Orlando Moreno, quien posibilitó el despojo de predios colectivos y al parecer padre del paramilitar Andrés Moreno.
Enrique Petro y Ligia Chaverra están protegidos con medidas provisionales de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Los esquemas de protección para Enrique Petro aprobados desde hace cinco años no han sido implementados.
En diciembre pasado se conoció que paramilitares iban a desarrollar un plan de atentados contra la vida e integridad de lideres y lideresas de Curvaradó y Jiguamiandó. Se teme que las actuaciones de ayer contra Ligia Chaverra y las conocidas hoy con Enrique Petro tienen que ver con esas pretensiones.
Bogotá, D.C. enero 23 de 2013
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz