Al borde de colapso civilizatorio caminando sobre el punto de no retorno. Explotación y consumo bajo la perspectiva de lo ilimitado, en un mundo de recursos limitados. Siglos y siglos bajo los cuales se concibió, creció y desarrollo el comercio, el mercado, llevado hasta el paroxismo por el capitalismo neoliberal, cosificado para quien lo volvió ante sí, el dios hecho a su imagen y semejanza, la humanidad el ser humano.
Los paralelismos de los antiguos pueblos originarios de los diferentes puntos del planeta tierra, en su visión sobre la interrelación entre el ser humano y nuestro planeta dan cuenta que la crisis no es solo de la concepción determinista económica, es de su causante en si.
Cambiar desde lo más profundo de nuestro ser, el sentir y hacer con cada uno de nuestros iguales y con nuestro medio ambiente, superar la objetivación cuadriculada, esquematizada por siglos, haciendo cuadriculada y esquematizada nuestra cultura sociedad y visión del todo, es imprescindible.
No es gratuito que de manera creciente se hable de eco socialismo tampoco lo es que desde que una parte de la intelectualidad marxista contemporánea hable de eco socialismo dicho concepto se esté alimentando y transformando desde el seno de los movimientos sociales integrados por los descendientes de nuestras culturas originarias y su visión del todo. Además que a partir de ello y nuestra crisis, cada vez más volteamos los ojos hacia nuestros antepasados, es decir volteamos los ojos hacia dentro.
De tal manera es conocer, sentir y comprender para transformar desde allí y desde el ahora el allá, a partir de la visión cosmogónica, esa misma que tachamos desde el occidentalismo como “arcaica”, “no civilizada”, “sepultada”.
Ya Marx de manera premonitoria nos advertía hacia donde nos llevaría el capitalismo pero también nos habló de la dialéctica y el ser libres.
Hoy se hace un afán comprender que interpretar la dialéctica y luchar por el socialismo no se puede limitar a la óptica del determinismo, cayendo en el fetichismo neo desarrollista, en el perpetuar el círculo vicioso del siglo económico basado en el consumo compulsivo para poder “crecer”, para ser “desarrollados”, “competitivos”, esto es alimentar el colapso. Las culturas originarias nos pueden dar la clave del cómo y el por qué.
Presos Políticos Y Prisioneros Guerra
RED INTERNACIONAL DE SOLIDARIDAD CON LAS PRISIONERAS Y PRISIONEROS POLITICOS COLOMBIANOS
Red-INSPP